BOLETÍN  
DE LA ACADEMIA  
NACIONAL DE HISTORIA  
Volumen XCVIII Nº 204  
Enero–junio 2020  
Quito–Ecuador  
ACADEMIA NACIONAL DE HISTORIA  
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Dr. Franklin Barriga Lopéz  
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BOLETÍN de la A.N.H.  
Vol XCVIII  
Nº 204  
Julio–diciembre 2020  
©
ꢀ Academia Nacional de Historia del Ecuador  
ISSN Nº 1390-079X  
eISSN 2773-7381  
Portada  
Luis A. Martínez  
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Quito  
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marzo2021  
Esta edición es auspiciada por el Ministerio de Educación  
ACADEMIA NACIONAL DE HISTORIA DELꢀECUADOR  
SEDE QUITO  
Av. 6 de Diciembre 21-218 y Roca  
2
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BOLETÍN AC ADEMIA NACIONAL DE HISTORIA DEL ECUADOR  
Nº 204–Vol XCVIII • julio–diciembre 2020  
BIENVENIDA A PATRICIA GALEANA  
COMO MIEMBRO CORRESPONDIENTE EXTRANJERA  
DE LA ACADEMIA NACIONAL DE HISTORIA  
Franklin Barriga López1  
Hablar de México y de Ecuador es referirse a una fraternidad  
de países similares en sus orígenes de milenios, identidades y aspi-  
raciones comunes, dentro del acontecer, pasado y actual, de nuestro  
continente.  
No hay diferencias entre ambos pueblos, cuando se recorre  
sus territorios y se palpa realidades semejantes, de admiración y pa-  
2
radoja. “Por mi raza hablará el espíritu”, la raza cósmica, la cultura y  
el progreso que preconizó ese mexicano que hizo tanto por el huma-  
nismo y la integración iberoamericana, José Vasconcelos (1882-1959),  
a quien se le debe la representativa frase que mucho dice y poco se  
aplica, la unidad latinoamericana y el desarrollo común a que llama  
la Historia y que, como emblema reluciente, exhibe el más grande y  
apreciado centro de estudios superiores de Iberoamérica, la Univer-  
sidad Nacional Autónoma de México, UNAM, con la que anhelamos  
suscribir un convenio de colaboración recíproca, como lo tenemos  
con otras afamadas universidades de América y del mundo.  
También en la UNAM, en su escudo, sobresalen las efigies  
del águila y del cóndor, formando un conjunto armónico, integrador,  
simbólico que se afianza en las raíces que provienen de los ancestros  
y se proyectan al vuelo de altas dimensiones, desde donde se otea  
latitudes dilatadas de libertad, democracia, y justicia, que nunca  
deben faltar en estas tierras, para afianzar y mejorar su destino.  
Como en ninguna otra parte del planeta, he podido apreciar  
1
2
Director de la Academia Nacional de Historia. Autor de más de 120 obras publicadas en el  
país y el exterior.  
Cfr. José Vasconcelos en: Javier Sicilia, José Vasconcelos y el espíritu de la universidad, Universidad  
Nacional Autónoma de México, México, 2001, p.31  
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Bienvenida a Patricia Galeana  
que uno de los más relucientes patrimonios intangibles y tangibles  
del mexicano es su orgullo de pertenencia, ese arraigo a lo nacional y  
propio, esto es lo que afianza y eleva su ser individual y colectivo,  
3
como en la música lo testimonia ese México lindo y querido, ranchera  
que acompañan mariachis, que consolida el alma nacional, hasta ma-  
nifestaciones, desbordantes y cotidianas, que alientan el civismo y re-  
saltan la mexicanidad, con íconos de reciedumbre y significación  
mayor, como la figura egregia de Benito Juárez (1806-1872), acerta-  
damente conocido como Benemérito de las Américas; la admirable  
Tenochtitlan, demostración de la grandeza que había en las civiliza-  
ciones prehispánicas; las realizaciones de la Nueva España que riva-  
lizó con la ibérica, que realmente no fue Virreinato sino reino si  
analizamos los territorios, poderío, y esplendor que abarcó, desde Ca-  
nadá hasta Nicaragua, el Caribe, Filipinas e islas de Oceanía; la Re-  
pública, sus leyes liberales y sus esfuerzos por ir hacia adelante, en  
atmósfera de soberanía y desarrollo; el Museo Nacional de Antropo-  
logía, donde la memoria histórica desafía al tiempo, o reconocemos  
a México con íconos de mundial relevancia, como Octavio Paz (1914-  
1
998), Premio Nobel de Literatura 1990, que, en su obra El laberinto  
de la soledad retrató las sombras y las claridades de la gran nación.  
Qué podemos decir si recordamos a Diego Rivera (1886-  
957), David Alfaro Siqueiros (1896-1974) y José Clemente Orozco  
1
(1893-1949), los insignes muralistas y junto con ellos, a tantos otros  
motivos que enorgullecen a toda América Latina y el Caribe, dentro  
del sincretismo que unió culturas, sangres, cosmovisiones y esperan-  
zas, para dar forma a la realidad contemporánea. En el Paseo de La  
Reforma, en el corazón de la metrópoli, El Ángel, monumento inau-  
gurado el 16 de septiembre de 1910, contiene no solo los restos mor-  
tales de los héroes de la epopeya libertaria, la estatua de La Victoria  
coronada de laureles, los eslabones rotos de la cadena opresora, sino  
la esencia libertaria y soberana, por eso, es el centro de peregrinacio-  
nes no únicamente cívicas que alienta la tea que permanentemente  
ilumina la dignidad y el patriotismo, también el centro de admira-  
ción de lo artístico.  
3
Cfr. Chucho Monge en: Marisa Eddy, Clara y los espejos, editores entrelíneas, Madrid, 2006,  
p.293  
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Franklin Barriga López  
En este contexto, el controvertido y brillante Carlos Monsi-  
váis (1938-2010) escribió:  
La Unidad Nacional es el requisito para el progreso, la exaltación del  
sincretismo como garantía del equilibrio político, cultural y social. De-  
sunidos, somos víctimas propicias del enemigo (la subversión, la de-  
recha, la izquierda). Nos congrega el sentimiento nacionalista (virtudes  
insustituibles de nuestra problemática, perfiles propios, sustentación  
en las raíces), el culto a los héroes (la cultura y la historia como antolo-  
gía de personalidades y obras excepcionales), el pasado como catálogo  
o enumeración orgullosa, de las ruinas prehispánicas a Juárez, del mu-  
ralismo a José Gorostiza. La Unidad Nacional y la búsqueda del “pro-  
greso” concluyen en una jamás definida política cultural del Estado,  
que puede incorporar –sin demasiados juicios y prejuicios- las más en-  
contradas tendencias e interpretaciones intelectuales y artísticas que,  
así impliquen una actitud radical (de izquierda o derecha, comunista  
4
o guadalupana), no representan una disidencia irreconciliable.  
El Instituto Matías Romero, que labora desde 1974, imparte  
formación y capacitación a quienes laboran en el Servicio Exterior,  
dentro de un marco educativo eficiente, con prestigio, solidez de cá-  
tedras, para que los profesionales en el ramo, los de carrera, puedan  
desenvolverse con excelencia en los complejos ámbitos de la diplo-  
macia y las relaciones internacionales.  
En 1928, con sede en México y producto de la VI Conferencia  
Internacional de la OEA, se creó el Instituto Panamericano de Geo-  
grafía e Historia, como organismo internacional, científico y técnico  
dedicado a la generación y transferencia de conocimientos especia-  
lizados, con secciones nacionales en Argentina, Belize, Bolivia, Brasil,  
Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos,  
Guatemala, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay,  
5
Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela . Con el IPGH  
Sección Nacional del Ecuador, nuestra Academia ha mantenido y  
4
5
Carlos Monsiváis, “Notas sobre la cultura mexicana en el siglo XX”, en Historia general de Mé-  
xico, El Colegio de México, versión 2000, Talleres de Editores e Impresores Profesionales EDIM-  
PRO, S.A., México, pp. 961-962.  
IPGH, “Secciones-Nacionales”, Instituto Panamericano de Geografía e Historia. Ver en: https://  
www.ipgh.org/secciones-nacionales.html (05-11-2020)  
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Bienvenida a Patricia Galeana  
mantiene los mejores vínculos de colaboración recíproca en el cum-  
plimiento de sus fines y objetivos.  
He rememorado a la UNAM, al Instituto Matías Romero y al  
IPGH, por cuanto son tres renombradas instituciones a las que co-  
nozco, en las que he disertado y he oído referencias de lo más elo-  
giosas sobre la Dra. Patricia Galeana, en cuyo honor la Academia  
Nacional de Historia del Ecuador lleva a cabo la presente Sesión So-  
lemne, con motivo de la incorporación de esta maestra de la Historia,  
en calidad de Miembro Correspondiente Extranjera, a nuestra insti-  
tución que el 24 de julio próximo pasado fecha en la que cumplió 111  
años de fecunda y prestigiosa existencia; por tal motivo, me es grato  
hacer estas anotaciones sintéticas en torno a esta notable dama me-  
xicana:  
Historiadora, licenciada en Historia, maestra en Historia de  
México y doctora en Estudios Latinoamericanos por la UNAM. Ha  
sido investigadora del Instituto de Investigaciones Históricas de la  
misma Universidad. Ha impartido cátedra en diversas instituciones  
nacionales, como los anotados Instituto Matías Romero y la UNAM.  
En el extranjero: en la Universidad Externado de Colombia, en la  
Universidad Autónoma de Madrid y en la Universidad de Califor-  
nia, en Los Ángeles, Estados Unidos.  
Ha sido coordinadora académica del Instituto de Investigacio-  
nes “Dr. José Ma. Luis Mora” (1981–1984); investigadora del Instituto  
de Investigaciones Históricas (1984–1988) y directora general de In-  
tercambio Académico de la UNAM (1987–1988); directora general  
del Acervo Histórico Diplomático de la Cancillería de México “Ge-  
naro Estrada” (1988–1991); directora general del Instituto “Matías  
Romero” de Estudios Diplomáticos de la Secretaría de Relaciones  
Exteriores (1991–1994), donde estableció el posgrado para los miem-  
bros del Servicio Exterior Mexicano; directora del Archivo General  
de la Nación (1994–1999); presidenta de la Asociación Mexicana de  
Estudios Internacionales (AMEI, 1995–1997); integrante de la Junta  
Directiva de la Universidad Autónoma Metropolitana (2013–2016);  
directora general del Instituto Nacional de Estudios Históricos de  
las Revoluciones de México (INEHRM, 2013-2018).  
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Franklin Barriga López  
En el Senado de la República fue secretaria técnica de la Co-  
misión para los Festejos del Bicentenario de la Independencia y Cen-  
tenario de la Revolución Mexicana (2007-2010), así como para los  
festejos del Sesquicentenario de la Batalla de Puebla (2011-2012), ade-  
más de secretaria técnica del Comité de los Tres Poderes de la Unión  
para la Conmemoración del Centenario de la Constitución de 1917  
(2013-2017). Fue secretaria ejecutiva de la Comisión Nacional de De-  
rechos Humanos (1999–2000) y consejera de la Comisión de Dere-  
chos Humanos del Distrito Federal (2002 - 2013). Además, presidió  
el Comité de Historia Cultural de la Comisión de Historia del Insti-  
tuto Panamericano de Geografía e Historia (IPGH) de la Organiza-  
ción de Estados Americanos (OEA), (2005-2014). Actualmente es  
presidenta de la Comisión de Historia del IPGH, desde 2014.  
Es, asimismo, consejera del Centro de Estudios de Historia de  
México (Carso); coordinadora del Área de Archivos Públicos de Li-  
bertad de Información-México A. C. (LIMAC); preside la Asociación  
de Especialistas sobre La Reforma, la Intervención Francesa y el Se-  
gundo Imperio, A.C. (ARISI); es miembro de la Fundación Emiliano  
Zapata de Estudios e Investigación AC., miembro del Comité Ejecu-  
tivo de la Sociedad Europea de Cultura, con sede en Venecia.  
Presidenta fundadora de la Federación Mexicana de Univer-  
sitarias A.C. Fue vicepresidenta de la Federación Internacional de  
Mujeres Universitarias (IFUW, actualmente Graduate Women Inter-  
national, GWI); curadora, fundadora y directora del Museo de la  
Mujer; presidenta de la Asociación Mexicana de Estudios Interna-  
cionales; fundadora de la Academia Diplomática iberoamericana;  
Maestra Emérita de México por la Sociedad Mexicana de Geografía  
y Estadística; integrante de la Mesa Directiva de la Asociación Inter-  
nacional de Museos de la Mujer (IAWM) con sede en Merano, Italia.  
Hasta hace pocos días, embajadora plenipotenciaria de los Estados  
Mexicanos ante el Gobierno de la República de Colombia.  
La Dra. Patricia Galeana es autora de 15 libros, de 104 capítu-  
los de libros, coordinadora de 326 obras y prologuista de 70 obras  
de historia política, diplomática y de género.  
Entre las distinciones recibidas destacan el Reconocimiento  
Luis Javier Solana” por su labor en pro del derecho a la información;  
“
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Bienvenida a Patricia Galeana  
el Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural en 2006, por la  
difusión patrimonial en el programa Temas de Nuestra Historia en  
Radio UNAM, del Club de Periodistas de México A.C.; la Medalla  
“
Ignacio Manuel Altamirano” de la Sociedad Mexicana de Geografía  
y Estadística en 2007; Medalla Al Mérito Histórico “Capitán Alonso  
de León” en 2008 otorgado por la Sociedad Nuevoleonesa de Histo-  
ria, Geografía y Estadística; el Reconocimiento medalla y fistol “Fun-  
dación Caballero Águila” en 2006; el premio “Garza de la Plata”,  
máximo reconocimiento de la Universidad Autónoma del Estado de  
Hidalgo, en 2011; Medalla Al Mérito Ciudadano en 2011 concedido  
por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, por su labor en  
favor de las mujeres y por la creación del Museo de la Mujer; la Me-  
dalla “Valentín Gómez Farías” en 2012, dada por la Sociedad Mexi-  
cana de Geografía e Historia; la condecoración “Gran Orden Victoria  
de la República” en 2017, distinción de la Secretaría de la Defensa  
Nacional, la Academia Nacional de México y la Academia Nacional  
de Historia y Geografía, entregada por el Presidente de la República;  
el Reconocimiento “Juana Belén Gutiérrez de Mendoza” en 2017 en-  
tregado por el Frente Feminista Nacional; la Medalla “Omecíhuatl”  
en 2017 del Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México y la Pre-  
sea “Leona Vicario” en 2018, concedida por el Colectivo Nacional de  
Sororidad “Leona Vicario”.  
Este perfil demuestra que se trata de una intelectual de pri-  
mera categoría, investigadora, catedrática, escritora, conferenciante,  
lideresa de las mujeres, que ha hecho de su vida luminosa antorcha  
en las mejores causas del espíritu, historiadora de vocación y alta  
formación, a quien dentro de pocos minutos vamos a escucharle en  
su discurso estatutario, titulado “México en el horizonte latinoame-  
ricano”, con el cual se incorpora donde ratifica su versación y liga-  
mento profundo con su patria nutricia a la que realmente honra. Esta  
pieza oratoria, que ya la vais a escuchar, resume admirablemente un  
acontecer de milenios y los principales hitos de una vasta historia  
llena de enseñanzas, por sus contrasentidos y resplandores.  
En nombre de la Academia Nacional de Historia del Ecuador,  
me es sumamente satisfactorio brindar la más cordial bienvenida a  
la Dra. Patricia Galeano Herrera al seno de nuestra institución, en  
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Franklin Barriga López  
calidad de Miembro Correspondiente Extranjera. Seguros estamos,  
quienes conformamos este cenáculo, que la permanencia de esta con-  
notada colega en nuestra entidad será perpetua y positiva, como dis-  
ponen nuestros Estatutos. Sin duda, el acercamiento entre dos países  
hermanos, como son México y Ecuador, se incrementará con los vín-  
culos intelectuales que augura su presencia en nuestra corporación  
eminentemente científica, constructiva, pluralista.  
Luego de escuchar la exposición de la Dra. Galeana, me será  
sumamente grato imponerle la Medalla y el Escudo o Escarapela y  
entregarle el Diploma que le acreditan en el nivel alcanzado única y  
exclusivamente por sus méritos genuinos. La pandemia de corona-  
virus que soporta el planeta impidió que le tengamos físicamente  
con nosotros en esta ceremonia consagratoria, empero, está repre-  
sentada por la Dra. Raquel Serur, Embajadora de México en el Ecua-  
dor, a quien saludo con respeto y aprecio.  
Sala de los Directores de la Academia Nacional de Historia,  
Casa Alhambra, Quito, 9 de septiembre de 2020.  
Bibliografía  
EDDY, Marisa, Clara y los espejos, editores entrelíneas, Madrid, 2006  
MONSIVÁIS, Carlos, “Notas sobre la cultura mexicana en el siglo XX”, en His-  
toria general de México, El Colegio de México, Talleres de Editores e Impre-  
sores Profesionales EDIMPRO, S.A., México, 2000.  
SICILIA, Javier, José Vasconcelos y el espíritu de la universidad, Universidad Na-  
cional Autónoma de México, México, 2001  
IPGH, “Secciones-Nacionales”, Instituto Panamericano de Geografía e Historia. Ver  
en: https://www.ipgh.org/secciones-nacionales.html (05-11-2020)  
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La Academia Nacional de Historia es una  
institución intelectual  
y
científica,  
destinada a la investigación de Historia  
en las diversas ramas del conocimiento  
humano, por ello está al servicio de los  
mejores  
intereses  
nacionales  
e
internacionales en el área de las  
Ciencias Sociales. Esta institución es  
ajena a banderías políticas, filiaciones  
religiosas,  
intereses  
locales  
o
aspiraciones individuales. La Academia  
Nacional de Historia busca responder a  
ese  
carácter  
científico,  
laico  
y
democrático, por ello, busca una  
creciente profesionalización de la  
entidad, eligiendo como sus miembros a  
historiadores  
entendiéndose por tales  
profesionales,  
quienes  
a
acrediten estudios de historia y ciencias  
humanas y sociales o que, poseyendo  
otra formación profesional, laboren en  
investigación histórica y hayan realizado  
aportes al mejor conocimiento de  
nuestro pasado.  
Forma sugerida de citar este artículo: Barriga López, Franklin,  
"
Bienvenida a Patricia Galeana", Boletín de la Academia Nacional  
de Historia, vol. XCVIII, Nº. 204, julio diciembre 2020,  
Academia Nacional de Historia, Quito, 2021, pp.310-316  
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