1950, la evaluación de los datos censales respecto al grado de inte-
gridad y calidad de la información recogida por los encuestadores.
3
De todas formas, el consejo es que a pesar de las dificultades, los his-
toriadores que quieran estudiar los problemas ligados a la población,
o los demógrafos históricos, deben empezar por estudiar –y corregir–
los censos, porque, finalmente, estos son la “meta a la que converge
todo lo demás”.
4
El objetivo de este artículo es rescatar del olvido un eslabón
importante para el estudio de la población de la capital ecuatoriana,
porque fuera de datos dispersos, su finalidad fue distinta a la de
cualquier censo. De lo consignado aquí no podemos extraer mucho,
pero es suficiente para entender la estructura general de la población,
como es su conteo total por parroquias y
, la estructura por sexo y
distribución cantonal. Por fin, desde 1906 se desagregó las parro-
quias r
urales para tener una contabilidad de la capital.
Pero para poder dar sentido a estos contenidos hemos ar-
mado como dinámica general, el uso de las estadísticas vitales para
poder entender mejor la relación fecundidad-mortalidad y, en tér-
minos temporales, la década de 1910 es importante demográfica-
m
ente hablando porque sus curvas muestran un comportamiento de
la población que no habían tomado en cuenta otros censos, como
1913 o 1915, y dibuja mejor los efectos de la crisis de 1918-1919.
5
Los guarismos que presento fueron tomados de el periódico
El Día, de abril de 1922. Sin duda contienen errores en la transcrip-
ción de los resultados fáciles de subsanar, como la tabla final que in-
vierte la columna hombres por mujeres, pero, por suerte, se publicó
t
ambién el acta final del escrutinio por parroquias, con lo cual se
pudo corregir el error.
3 Scripta Nova. Revista electrónica de geografía y ciencias sociales Universidad de Barcelona. ISSN:
1138-9788. Depósito Legal: B. 21.741-98Vol. XVIII, núm. 471, 10 de marzo de 2014.
4 T.H. Hollingsworth, Demografía Histórica. Cómo utilizar las fuentes de la historia para construirla,
México, Fondo de Cultura Económica, 1983, p 61
5 Para
los casos de la gripe española ver los trabajos de Germán Alfredo Rodas Cháves, Historia
de la “gripe española” que llegó a Quito en 1918, Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecua-
dor, Quito, 2015 y Christian Grijalva Aman, La gripe española en el Ecuador 1918-1919, StreetLib,
Madrid, 2017.
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Quito y el Censo de 1922
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