Incidencia histórica de actores políticos de Cotopaxi
en el ejercicio del poder en el Ecuador
un referente permanente para el desahogo popular, es así que año
tras año, los temas preferidos para nuestra curiosa forma de celebrar
la finalización de los mismos, son recreaciones de acontecimientos
con monigotes de políticos; en periódicos la sección de caricaturas
ocupa lugar importante en la página de análisis y son apreciadas por
los lectores las revistas especializadas en humor político; incluso li-
bros como el de Javier Gomezjurado Zevallos, Historias y Anécdotas
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Presidenciales; o el de Francisco “el Pájaro” Febres Cordero, Los hijos
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del suelo; o el del expresidente Rodrigo Borja, Recovecos de la historia
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ofrecen esas miradas humanas, carismáticas o críticas de los perso-
najes y sus acciones. Del general Enríquez Gallo, Javier Gomezjurado
Zevallos en su libro “Historias y Anécdotas Presidenciales”, narra lo
que él titula “Traicionado por su ahijado”:
Federico Páez había sido padrino de bautizo del guagua Alberto Enrí-
quez Gallo, quien con el tiempo entró al Ejército y llegó a general de
Brigada.
Cuando en 1935 el Ejército Nacional le entregó el poder a Páez, para
evitar el triunfo de los conservadores en las elecciones que había con-
vocado Antonio Pons. Páez llamó a su ahijado de bautizo, el General
Enríquez, para que ocupara el Ministerio de Guerra y Marina, donde
lo mantuvo por varios meses, con beneplácito del país, pues Enríquez
Gallo era un individuo popular y de izquierda.
Un buen día, Páez comenzó a perseguir a los izquierdistas, motivado
por los reaccionarios de su gabinete; entonces Enríquez Gallo compren-
dió que había llegado la hora de poner punto final a la Dictadura Civil,
que no se apoyaba en nadie, y dio un Golpe de Estado que derrocó a
su padrino Páez.
En efecto el 23 de octubre de 1937 a las 2 y 35 de la madrugada, llegaron
a la Casa Presidencial, que estaba ubicada en la Mejía y Guayaquil,
atrás de San Agustín, los Comandantes de la I y II Zona.
¿
A qué se debe el honor de esta visita?, –les preguntó Páez–.
Los militares fueron los que le confiaron el cargo que usted tiene, señor
Presidente, ahora le piden que renuncie, –exclamó uno de ellos–.
Y con toda tranquilidad Páez concluyó:
25 Javier Gomezjurado, Historias y Anécdotas Presidenciales, editorial UTPL, Loja, 2009.
26 Francisco Febres Cordero, Los hijos del suelo, Editorial Planeta del Ecuador, 2005.
27 Rodrigo Borja, Recovecos de la historia, Editorial Planeta del Ecuador, 2003.
BOLETÍN ANH Nº 208-B • 165–187
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