@article{Barriga López_2022, title={LA ETAPA FINAL DE LA INDEPENDENCIA COMIENZA EN GUAYAQUIL}, volume={100}, url={https://academiahistoria.org.ec/index.php/boletinesANHE/article/view/292}, abstractNote={<p>El 9 de octubre de 1820 y hechos posteriores, constituyen lecciones que jamás tienen que apartarse de las generaciones presentes y venideras, como lo es el precedente 10 de agosto de 1809 que convirtió a Quito, eje de nuestra nacionalidad, en Luz de América. Guayaquil, con la Fragua de Vulcano y la Aurora Gloriosa, aumentó la iluminación en los senderos que condujeron a la libertad. De aquí, asimismo como lo hizo la División Protectora de Quito, que honra a Guayaquil y al país, salió luego el ejército grancolombiano, en una cabalgata, al mando de Antonio José de Sucre, que fue incrementándose con la contribución humana, económica y de apoyo, que recibió grandes colaboraciones en su difícil recorrido, en condiciones precarias, a lo largo de pantanos y montañas, llanuras y abismos, ríos caudalosos y nieves eternas, hasta llegar a las faldas del Pichincha, en donde se produjo la Batalla en que las fuerzas patriotas, por sus hazañas, ingresaron, merecidamente a la posteridad, como ejemplo de bizarría.</p> <p>La batalla de Pichincha fue decisiva para lo que ahora es Ecuador y consolidó la marcha de las fuerzas republicanas para la liberación definitiva del Perú y del Alto Perú (actual Bolivia), y el cese de las formidables campañas libertarias en América del Sur, con los resultados obtenidos en Junín y Ayacucho, el 6 de agosto y 9 de diciembre de 1824, respectivamente.</p>}, number={207}, journal={Boletín Academia Nacional de Historia}, author={Barriga López, Franklin}, year={2022}, month={ago.}, pages={740–743} }