MONTALVO, MAESTRO DE PENSAMIENTO, SENTIMIENTO Y ACCIÓN

Resumen

Juan Montalvo, una figura ejemplar y una fuente de inspiración, encarna la coherencia absoluta entre sus pensamientos, sentimientos y acciones. En 1852, Montalvo se unió a la sociedad literaria "La Ilustración" junto a destacados intelectuales como Julio Zaldumbide, Agustín Yerovi, Modesto Espinosa y Miguel Riofrío. Su estrecha relación con estos pensadores y su influencia política reflejan su carácter.  

Su intelectualidad ha sido ampliamente elogiada: pensador profundo, moralista, patriota y maestro de la sátira. Montalvo se opuso a los conservadores y al clero sin ser ateo. Convirtió la pluma en su herramienta fundamental contra el conservadurismo y de manera especial contra el gobierno y la política de García Moreno. Escribió varias obras entre las que se destacan El Cosmopolita, Las Catilinarias, Los capítulos que se le olvidaron a Cervantes, Los Siete Tratados.

Juan Montalvo fue un lector asiduo, intuitivo, conspicuo, alimentaba su inteligencia y su espíritu, sabía extraer la esencia tanto como contextualizar las luces del pensamiento, de ahí que sus obras se tornaron en la lámpara encendida para la juventud. La vida y el legado literario de Juan Montalvo son un testimonio de coherencia, intelecto y compromiso. Su pensamiento perdura y sigue siendo relevante en la sociedad actual.